Cirò – El vino emblemático de Calabria
Calabria cuenta con 12 DOC, pero una de ellas representa alrededor del 80% del vino con denominación de origen de la región. Creada en 1969, Cirò es la denominación calabresa más antigua y reconocida. No sólo eso, Cirò es uno de los vinos más antiguos del mundo, con una historia vinícola que viene de los antiguos griegos.
La región vinícola de Cirò está situada en el sur de la provincia de Crotone, entre los contrafuertes orientales del monte La Sila y la costa jónica. Las 530 hectáreas de viñedos que se extienden entre los cuatro municipios de Cirò, Cirò Marina, Melissa y Crucoli están plantadas en su mayoría con la variedad singular Gaglioppo, una uva de piel gruesa, de maduración tardía y muy tánica que se ha relacionado genéticamente con la Sangiovese.
El productor calabrés Raffaele Librandi, propietario de la bodega familiar del mismo nombre, es el responsable del Consorcio de la DOC Cirò y Melissa, cuya misión es preservar el patrimonio y la identidad de los vinos Cirò. Atribuye el éxito y la popularidad de Cirò al clima de la región y a sus tradiciones vitivinícolas: “Además de nuestro singular terruño, una gran tradición vitivinícola se refleja en la calidad de nuestros vinos. Aún hoy, la mayoría de las bodegas son pequeñas y se presta gran atención al cuidado de los viñedos.”
Los vinos Cirò son predominantemente tintos y contienen al menos un 95% de uva Gaglioppo. El Cirò tinto es generalmente muy tánico y de gran cuerpo, con una fruta intensa. Los vinos Cirò Rosso Riserva (o Riserva Superiore) representan lo mejor que puede producir Calabria. Se conservan durante al menos dos años antes de su comercialización. En Cirò también se elaboran en cantidades muy limitadas vinos rosados y blancos con al menos un 90% de Greco bianco y hasta un 10% de Trebbiano.
“Los vinos Cirò son los más solicitados entre nuestros productos”, afirma Librandi. “Pasamos por una fase en la que había una curiosidad más evidente hacia los blancos, pero actualmente el Gaglioppo, tanto en vino rosado como tinto, está muy cotizado.”
En la denominación de origen Cirò se concentran 300 viticultores y 60 bodegas, en su mayoría pequeñas y medianas empresas, que venden el 65% de su producción en Italia. En 2008, con el fin de compartir conocimientos y promover la calidad de sus vinos, se fundó la asociación “Viticultores de Cirò”. “La función principal de la asociación es mantener las tradiciones vitivinícolas y mejorar constantemente la calidad de los vinos, garantizando al mismo tiempo que el trabajo en los viñedos sea ante todo rentable económicamente”, explica Librandi.
En la actualidad, una nueva generación de jóvenes viticultores está contribuyendo a una revolución de la calidad en Calabria, centrándose en su variedad insignia, la Gaglioppo, y respetando las tradiciones vitivinícolas locales. “En la última década, los vinos calabreses se han vuelto sin duda más elegantes, y el nivel de calidad ha mejorado mucho”, añade Librandi.
El reconocimiento de la alta calidad de estos vinos debería estar pronto garantizado por la denominación de origen Cirò, que en 2019 activó los trámites para convertirse en la primera DOCG de Calabria.